¿Tú también te has cansado de comer pan que no sabe a nada y que, aunque engorda un montón, no alimenta? En La Noria lo tenemos claro: apostamos por el pan de masa madre porque mejora la digestión, es más saludable, más rico, más aromático y más sabroso.
La masa madre, en inglés ‘sourdough’, es harina y agua que han fermentado naturalmente; una fórmula que lleva miles de años empleándose para hacer pan. Sin levaduras ni aceites ni grasas ni aditivos; solo agua, harina y sal.
El largo proceso de fermentación para leudar el pan (generalmente 8 horas) rompe la proteína del gluten, transformándola en proteínas más simples y aminoácidos y, como consecuencia, se obtiene un pan más digerible y facilita su consumo a personas sensibles al gluten. Mientras la masa fermenta, hace una predigestión del almidón, reduciendo el contenido de glucosa y generando un pan con menor índice glicémico, que lo convierte en una opción ideal para diabéticos.
Antes de continuar analizando las bondades del pan de masa madre, hacemos un inciso para subrayar la primera moraleja:
Siempre es bueno volver al origen de las cosas. Mientras más puro y menos ingredientes tenga un alimento será más saludable y tendrá una mejor absorción en el organismo.
Una vez más la clave está en el concepto ‘slow’ ¡fuera prisas! Vamos a dedicarle a cada actividad el tiempo que merece y necesita, sobre todo, a lo relacionado con nuestra alimentación. De ahí a que, como ya explicábamos antes, el proceso de fermentación de la masa madre sea largo y lento. Gracias a eso, el número de bacterias beneficiosas crece para favorecer el tracto digestivo. Del mismo modo, el aumento de ácido láctico eleva la acidez de la masa generando un ambiente ideal para la enzima fitasa, que ayuda a descomponer el ácido fítico presente en las harinas integrales. Esto permite una mejor absorción de vitaminas como la B1, el zinc, el hierro, el magnesio, el cobre y el fósforo, que se suelen ver disminuidos cuando se hace pan con levadura comercial (levadura de cerveza).
Por último, este tipo de masa, al tener una mayor acidez, permite conservar el pan más fresco y sin hongos durante más tiempo.
¡Pásate al pan de masa de madre!
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